Beneficios al ser parte de una red mundial de ministros.

1. Comunidad
Una extensa relación de amistad ministerial que lo guíe a desarrollar el potencial de Dios que esta en usted.

2. Capacitación
Encontrar una variada colección de experiencias, enseñanzas y herramientas útiles para el ministerio.

3. Apoyo
La oportunidad de conocer mentores y otros ministerios de apoyo que están dispuestos a escuchar y aportar.
Historia
La Red Apostólica de Ministros de Restauración (R.A.M.R.) es una red global de expansión de apóstoles y profetas con una misma mentalidad. Incluye el ministerio quíntuple y las iglesias, ministerios y organizaciones que ellos dirigen.
La red es presidida internacionalmente desde Chicago, Estados Unidos, por el fundador de la misma, Dr. Alberto J. Guerrero y el presidente en cargo, apóstol Manuel Concua.
El apóstol Alberto J. Guerrero, tras haber conocido a su Mentor primordial Jesucristo en el año 1978, pasa a fundar su primera iglesia en 1991.
En enero de 1997 es ordenado al ministerio apostólico por su padre espiritual y cobertura apostólica, de toda la vida, el Rev. Juan Álvarez.
Ante la necesidad de organizar, estructurar, equipar y enviar ministros a establecer el Reino de Dios en la tierra, el apóstol Guerrero establece La Red Apostólica de Ministros de Restauración (R.A.M.R.) confiando en Dios que la visión dada estaba dando sus primeros pasos.
El inicio de este ministerio produjo nacimientos de iglesias en: Ecuador, Panamá, Agentina, España, Santo Domingo, Puerto Rico, Peru, Bolivia y Kenya, además de ciudades en Estados Unidos tales como: Cicero, Wheaton, Romeoville, Humboldt Park y Belmont.
El Apóstol Guerrero reside en Chicago junto a su amada esposa Lucy, sus tres hijos y dos nietos. Allí también pastorean una fructífera iglesia bilingüe llamada “Mundo de Fe” y dirigen el ministerio radial, “Radio Restauración”.
Relacionándose juntos en un convenio de compañerismo y bajo la supervisión y liderazgo visionario del apóstol Guerrero, aquellos afiliados a RAMR compartirán un mandato divino para avanzar en la reformación apostólica y la agenda de Dios para el Reino en los últimos tiempos, afectando el destino de naciones y finalmente realizando el cumplimiento de la Gran Comisión de nuestro Señor Jesucristo.
La red identifica apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros emergentes, enseña la revelación de la verdad presente en conferencias y seminarios, y proporciona respaldo a ministerios con comedores infantiles, cuidado de viudas y reintegración de adictos a la sociedad.
Tenemos por cierto que hay una aceleración de gracia apostólica y unción para edificar iglesias fuertes tales como “Antioquía” que funcionan en gobierno territorial, al mismo tiempo que se sueltan cortantes y relevantes ministerios apostólicos y proféticos que están cambiando la atmósfera espiritual sobre regiones, naciones y continentes.
Desde sus inicios la Red Apostólica de Ministros de Restauración con siglas (R.A.M.R.), fue creada por Dios para alcanzar a todas las naciones basado en la palabra dada por el Espíritu Santo al Dr. Guerrero y su esposa en el libro de los Salmos 2:8 : “ Pídeme, y te daré por herencia las naciones y como posesión tuya los confines de la tierra”. Por tanto, la visión de R.A.M.R. es : “Capacitar la los santos para la obra del ministerio hasta lo ultimo de la Tierra colaborando a la vez con otros ministerios que están en la misma vision.”
Predicar las buenas nuevas del evangelio del reino de Dios a toda persona mediante todos los medios de comunicación: Internet, Radio y TV, además de viajes apostólicos, para capacitación y envío hombres y mujeres de Dios con corazón de padres; para luego afirmar, consolidar, alimentar, sanar, equipar y restaurar a cada individuo que ha conocido a Jesús, para que sirva en la obra del ministerio y en el reino de Dios.
Estamos convencidos que Dios nos ha llamado a ser parte de la gran cantidad de ministerios que están haciendo la diferencia a través de la capacitación de ministros alrededor del mundo impulsando el descubrimiento, capacitación, activación y envío hombres y mujeres que se están levantando en sus naciones para establecer EL REINO DE DIOS.
Esperamos que encuentre, la relación de amistad ministerial que lo guíe a desarrollar el potencial de Dios que esta en usted y que le aclare la dirección que debe seguir para ser efectivo en las manos de Dios.

Desarrollo de la visión
Llevar las buenas nuevas del reino de Dios a la comunidad que nos rodea, representada por los pobres de espíritu, los quebrantados de corazón, los cautivos, los ciegos, los oprimidos, los enfermos, los deprimidos y a toda persona sobre la faz de la tierra que no lo conoce, por todos los medios disponibles.
Manifestar el amor de Dios a través del cuidado cercano de la multitud, representada por cada ser humano que acepte a Jesús como el Señor de su vida, para que pueda caminar en la seguridad que Dios ofrece.
Adiestrar, equipar y ayudar a cada discípulo, representado por cada miembro de la congregación, a descubrir y cumplir el propósito, el llamado y la voluntad de Dios para su vida; llevándolo a conocer su identidad como hijo, con derechos, privilegios, herencia y responsabilidades en el reino de Dios. También ofreciendo oportunidades de crecimiento espiritual a través de la Universidad Para Lideres (UPL).
Confirmar en cada discípulo el ministerio y dones espirituales que Dios les ha dado para que los desarrolle dentro y fuera de la congregación, fundamentándolos en los valores del Reino y la doctrina apostólica; renovando así su mentalidad para que su ser total sea transformado en espíritu, alma y cuerpo.
Comisionar a cada ministro (apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros), representados por los discípulos afirmados, para que haga la voluntad de Dios y llegue a su destino, llevando el Reino dondequiera que vaya. Enviar Ministros con armas poderosas para extender el reino de Dios por la fuerza a cada nación, echando fuera demonios, sanando a los enfermos, haciendo señales, milagros, maravillas y prodigios; resucitando muertos, predicando, enseñando y profetizando los misterios del Reino, para causar una reforma y un impacto en la sociedad. Con el propósito final de transferir un legado de bendición, prosperidad y justicia a las próximas generaciones. Enviar equipos apostólicos y proféticos para ayudar a estructurar, equipar e impartir a ministerios, iglesias o gobiernos en las diferentes naciones del mundo que así el Señor ordene.